EL USO Y EL ABUSO...

Estas últmas semanas, nos hemos hecho asiduos del Hospital Virgen del Rocio, más concretamente de urgencias infantiles. Han sido muchas visitas en cuestión de un mes tanto para el mayor como para el peque. Puedo asegurar que hemos recorrido gran parte de los posibles horarios que pueda tener un día.

Es realmente impresionante ver la sala y la antesala de ingresos en urgencias, y ver como está de saturada; hay momentos en los que realmente los médicos están saturados y no pueden por más, que hacer pasar de 2 en 2 o 3 en 3 para la primera toma de contacto con la criatura. Cuando te llaman por megafonía, te remarcan que pase un solo familiar y claro, aquí es donde yo no encuentro una explicación lógica al tema...

...Esta pasado Domingo 23 de Diciembre, sobre las 7 de la mañana, nos fuimos a urgencias con el peque porque tenía dificultades para respirar (una bronquitis,vaya); siendo domingo y a esas tempranas horas, urgencias no estaba colapsado sino que tenía una fluidez envidiable. No veas tú como estba el percal el Sábado por la tarde cuando fuimos por primera vez...llegué a contar 14 crios en la sala de espera y 53 adultos. 14 x 53.

Teniendo en cuenta que yo soy de ciencias, al hacer números me planteo la posibilidad de 2 adultos por cada crío con lo que me saldrían 14 críos y 28 adultos. Digo yo, si estamos en una sala de ingresos de URGENCIAS en donde el espacio no sobra precisamente, y lo que más se necesita es tranquilidad, que coño pintan allí abuelas, abuelos, hermanos, hermanas, y demás familiares y amigos ???

Por favor...Si sólo permiten un familiar por crío, que como mucho se quede un segundo para poder echar una mano en caso de necesidad pero, el resto, que hagan el favor de esperar fuera, y si tienen frío, que esperen noticias en casa. Es desesperante no poder sentarte en los contados bancos o sillas de urgencias porque para un crío hay 4 o 5 personas ocupando sitio, y más cuando estuve más de 3 horas casi de pié porque mi mujer estaba dentro con el peque.

Desgraciadamente y, aunque sea navidad, el sentido común en la mayoría de los mortales brilla por su ausencia, y para colmo, no se te ocurra decir nada porque encima hay quien te pone mala cara. Así nos luce el pelo, que nos da lo miso que otros se jodan con tal de hacer lo que a uno le da la gana...

Felices fiestas a todos, aunque algunos merecían más estar picando piedras en una cantera.